14/9/16

Dos maneras

Nacer con la tarea hecha o ir viviendo y retomarla.
Partir, crecer y entregarse
saborear los colores, enmudeciendo
saltar de la cama con una sorpresa
encontrar el rastro, seguir la huella.

Habitar el fin, poseerlo desde dentro,
abrir las ventanas interiores:
"todo está hecho".

Y mientras, llueve en las esquinas
de aquel que maldice su sonido.
El placer deja de saber a posibilidad
y queda relegado a consuelo.

Y por mucho que canten los pájaros,
siempre llorarán los niños en el corazón.

Dos maneras, dos caminos que contienen la palabra.
dos fuerzas que se saben dependientes.
Y no es una estación solamente,
es la actitud universal de un corazón sereno, bravo,
desesperado y deseoso de:
amar lo que ha creado.