la tarde toda inmensa,
el presente hacia adelante
mucho amor hacia los libros
la casa, el rincón, los detalles...
Una sombra no es un bostezo
ni el silencio una tormenta
hoy me refugio en la ventana
pero no quiero salir y ver
cómo la danza de la vida
hace su partitura.
Hoy soy yo el director de orquesta
y cada escalón no bajado es
un puente de mi imaginación.
Con el pensamiento creo un espacio
y de entre mil conceptos
hallo el mejor de los regalos:
la belleza.
No es de día ni de noche
cuando de repente uno
se encuentra con la libertad.
Es simplemente un espacio dichoso
donde no hay conflictos ni autoridades
solamente es amada la naturaleza
amorosa,
del encuentro perpetuo conmigo.
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